A todos nos gusta encontrar un producto que necesitamos o queremos a un precio menor del que tenía algunos días antes, cuando esto pasa pensamos que es la oportunidad perfecta para comprarlo y ahorrar un poco de dinero porque tiene un 15%, un 30%, un 45% o incluso un 70% de descuento, o podemos pagar 2 unidades y llevar 3.
Este tipo de ofertas son utilizadas por las marcas para incentivarnos a comprar, por eso, en fechas de descuentos como las rebajas de inicio de año, ten en cuenta estos consejos para que no tomes malas decisiones que afectarán tus finanzas.
Planea tus compras. Revisa muy bien qué es lo que realmente necesitas, haz una lista y establece un presupuesto máximo para cada artículo. Esto te ahorrará tiempo y además, no caerás en compras que no necesitas o se salen de tu presupuesto.
Compara precios. Antes de los días de descuentos, visita diferentes tiendas online en las que estén los productos que piensas comprar, compara el precio que tienen y comprueba si en realidad te va a representar un ahorro.
Asegúrate de que el precio que te dan realmente es una oferta. En los días de descuento, no te dejes llevar por la emoción y antes de realizar una compra consulta aplicaciones que te permiten escanear códigos de barras para conocer el historial de precios de un producto.
Usa tu tarjeta de crédito responsablemente. Si piensas comprar con este método, recuerda no superar tu capacidad de pago y tener presente las fechas de pago para no generar recargos, pues así lo que compraste en oferta finalmente te costará mucho más.
Usa tu sentido común. Antes de comprar siempre pregúntate si realmente necesitas ese producto que está en oferta, no creas todo lo que dicen las marcas y recuerda que muchas veces adquirir un artículo que tiene descuento puede desajustar tus finanzas porque era algo que no tenías planeado.
Ser un consumidor consciente y responsable también es aprovechar las ofertas de forma inteligente, no dejarse llevar por todo lo que nos ofrecen las marcas y saber poner límites entre lo que se puede comprar y lo que no.
Fuente: blog.finerio.mx
