Si eres ávido en las finanzas, sabrás que gastar no es lo mismo que invertir. De esta segunda forma haces crecer tu patrimonio económico a través de la liquidez que puedas obtener de diversos activos: autos, joyas, CETES, negocios o nuestra recomendación: bienes raíces.
Para invertir y obtener primas que realmente representen una ganancia frente a la financiación, debes asegurarte de tomar decisiones certeras, que estén basadas en consultas, comparaciones, investigación y asesoría.
Te recomendamos seguir esta guía que en Carza preparamos, para que la inversión en bienes raíces sea consensuada.
Uno de los principios más importantes a considerar durante la ruta que hemos creado para ti, es el 50 – 30 – 20. ¿A qué se refiere y cómo utilizarla? El razonamiento indica que del total de nuestros ingresos, el 50% se destine a gastos fijos (Alquiler, hipoteca, gastos médicos, alimenticios, etc.), el 30% a gastos variables (ocio, vestimenta, etc.) y el 20% para ahorro e inversiones.
Con lo anterior, puedes elegir diversas formas de ahorro en inversión, la que elijas, dependerá de tu proyección; por ejemplo, si estás invirtiendo en tu primer hogar, lo ideal es que del 50% que destinas a gastos fijos, la mitad sea para liquidar tu inversión al largo plazo, es decir, pagar la hipoteca.
Ten en cuenta tu proyección y la división de tu ingreso total cuando estés comparando lo que cada banco te ofrece, sobre todo el porcentaje de intereses y el plazo en que se deben pagar, de esta forma tendrás siempre en cuenta tu capacidad de pago.
Recuerda que como expertos en bienes raíces y con el expertise de más de 38 años en este ramo, estamos disponibles a guiarte en cada paso al invertir en bienes raíces. Toma decisiones inteligentes, estamos para ti.