La crisis sanitaria ha provocado que, para patologías distintas al coronavirus, demoremos las visitas al médico por temor al contagio, causando un mal control de la enfermedad y un agravamiento de la salud. Mientras la tendencia de contagios se mantiene a la baja, es importante retomar la agenda de salud, y con ella las revisiones anuales.
Realizarse chequeos médicos cada año es muy importante ya que, además de comprobar tu estado de salud, también te permite detectar enfermedades que posiblemente no presenten síntomas y no sean fáciles de percibir.
Tu edad, antecedentes familiares y el estilo de vida afectarán la frecuencia con la que necesitas realizarte un chequeo. No esperes hasta tener algún síntoma, es importante acostumbrarse a cuidar de uno mismo acudiendo a chequeos regulares.
Las revisiones médicas y pruebas de detección son necesarias por las siguientes razones:
- Evitar que problemas de salud se vuelvan crónicos.
- Aumentar las posibilidades de tratamiento y cura.
- Conocer el estado de tu cuerpo a través de un diagnóstico profesional, no solo te ayudará a ser precavido o controlar enfermedades, también te brindará tranquilidad.
Si tienes antecedentes familiares de una determinada enfermedad u otros factores de riesgo, los controles de salud periódicos son aún más importantes.
Si eres mujer, no pases por alto la revisión ginecológica anual, que tiene como principal finalidad la prevención y detección temprana de alteraciones relacionadas con los órganos genitales femeninos, como enfermedades de transmisión sexual y cáncer ginecológico y de mama. Algunas de las pruebas que sirven para evaluar tu salud ginecológica y deben realizarse de forma periódica son:
Mamografía: es una radiografía de tu seno para detectar el desarrollo de cáncer de mama.
Citología: es una prueba en la que el ginecólogo extrae células del cuello uterino para detectar lesiones precursoras del cáncer de cuello de útero e incluso infecciones vaginales
Examen pélvico: es un examen en el que se palpa los órganos femeninos para comprobar si el tamaño y forma son normales.
Dependiendo de tu edad y antecedentes, el ginecólogo te recomendará la realización de una colonoscopia.
Si eres hombre, te aconsejamos los siguientes controles:
Examen de próstata: sirve para detectar a tiempo el cáncer de próstata. El urólogo evaluará el estado de tu próstata mediante un examen rectal y posiblemente incluso solicitará un análisis de sangre de antígeno prostático específico (PSA).
Examen testicular: permite detectar cambios en el color y el tamaño de los testículos.
Colonoscopia: es una prueba médica recomendable para todas aquellas personas a partir de los 50 años (o a partir de 40 años si tienen antecedentes). Consiste en la exploración del interior del colon y el recto para detectar posibles anomalías.
Fuente: corachan.com